I) Generalidades sobre relaciones simbióticas.
Relaciones interespecíficas.
Simbiosis: discrepancia en el concepto.
Ectosimbiosis y Endosimbiosis.
Mutualismo: introducción.
Parasitismo: introducción.
Comensalismo: introducción.
II) Mutualismo.
Algas-Coral (zooxantelas)
"Pájaro guía de la miel"-Ratel
Picabueyes-Bovino.
Pez cirujano-Tiburón.
Hormigas-Acacias.
Anémona-Pez payaso.
Hormigas-Pulgones.
Polinización mediada por abejas
Cocodrilo del Nilo-Chorlito egipcio.
III) Parasitismo.
Tricocéfalo
Virus de la Polio Humana
Leishmania
Gusano de la Hidátide
Lamprea
Ladilla
Myrmeconema neotropicum
Trypanosoma cruzi
IV) Comensalismo.
La rémora
La bellota de mar y el mejillón
Carroñeros y predadores
El cangrejo ermitaño
Comensales del gusano posadero
Clione antarctica e Hyperiella dilatata
Comensales de la marabunta
Foresis en ácaros
El pájaro Carpintero
Gaviotas
Bibliografía
lunes, 25 de mayo de 2009
Relaciones interespecíficas
Para poder hablar de simbiosis primeramente debemos entender lo que es una relación interespecífica.
Las relaciones interespecíficas son un tipo de relación en el cual las especies involucradas establecen un tipo de vínculo entre ellas. Estos vínculos pueden ser desde la simbiosis hasta la depredación.
Las relaciones interespecíficas son un tipo de relación en el cual las especies involucradas establecen un tipo de vínculo entre ellas. Estos vínculos pueden ser desde la simbiosis hasta la depredación.

Hay varios tipos de relaciones interespecíficas, algunas de las que nos interesan son:
- Mutualismo: relación simbiótica en la que la asociación es ventajosa para todos los involucrados.
- Comensalismo: relación simbiótica en la cual un mienbro se beneficia mientras que el otro no se ve afectado.
- Parasitismo: relación simbiótica en la que una especie (hospedador o huésped) sale perjudicada. La especie simbiótica es denominada parásito.
- Depredación: no es un tipo de relación simbiótica, en cambio si lo es interespecífica, ésta consiste en la caza que sufren algún tipo de especies denominadas presas por otros que se alimentan de ellas llamados depredadores.La depredación no nos interesa en este trabajo, pero no viene de más mostrarla para así conocer en que consiste.
Simbiosis: discrepancia en el concepto.
En el siglo XIX se acuñó el término simbiosis que se definió como organismos diferentes viviendo juntos, en el cual los individuos de distintas especies viven estrechamente asociados de forma equilibrada.
Dentro de este término se incluyó tanto a las asociaciones mutualistas (en las que ambos organismos obtendrían algún beneficio) como a las asociaciones parasitarias (en las que uno se beneficia a consecuencia del otro). Dependiendo de las condiciones ambientales o fisiológicas de los organismos en cuestión, podrán actuar como mutualistas o parásitos.
Dentro de este término se incluyó tanto a las asociaciones mutualistas (en las que ambos organismos obtendrían algún beneficio) como a las asociaciones parasitarias (en las que uno se beneficia a consecuencia del otro). Dependiendo de las condiciones ambientales o fisiológicas de los organismos en cuestión, podrán actuar como mutualistas o parásitos.
Características de la simbiosis:
- Suelen ser de manera permanente, en estos casos los individuos afectados se ven obligados a vivir siempre a expensas de esta relación, ya que de otra manera morirían
- Hay especies que son tan dependientes entre ellas que ninguna de las dos puede sobrevivir sola. Un ejemplo de este tipo de especies son los líquenes donde el alga suministra energía y el hongo aporta soporte y protección.
- Otro tipo de simbiosis es aquella en la que los dos organismos que viven juntos pueden separarse y vivir independientemente. A este tipo de relación se le llama facultativa.
- Los organismos que forman la simbiosis suelen ser normalmente de distinto tamaño, denominandose al de mayor tamaño normalmente huésped mientras que al pequeño se le llama simbionte.
- Los simbiontes pueden ser externos al huésped, en este caso se dice que se da una ectosimbiosis, en la endosimbiosis en cambio el simbionte se encuentra en el interior del huésped. Además de estos dos tipos de simbionte también pueden estar en el interior de la célula siendo intracelular, o estar en el interior del organismo pero fuera de las células siendo entonces extracelular.
- El huésped puede obtener el simbionte por transmisión, o mediante el ambiente externo.
- Las simbiosis suelen ser muy específicas, siendo siempre entre los mismos organismos y estableciendo relaciones de beneficio común o bien de beneficio propio.
- Hay algunos organismos que al asociarse presentan estructuras que no formarían de estar por si solos.
- Los organismos se asocian normalmente con fines nutricionales, aunque también afectan otro tipo de factores como son la protección y la higiene.
- Por ultimo los organismos pueden obtener ambos beneficio (mutualismo) , salir alguno perjudicado (parasitismo) ,o no verse afectado (comensalismo).
Entre estos tres tipos de simbiosis existe una gran discrepancia en cuanto a si son o no simbiosis en el sentido estricto de la palabra.
Originalmente la simbiosis ha sido la asociación de varias especies que mantienen una relación cualquiera, pero hoy en día solemos entender como simbiosis solo a las relaciones en las cuales todos los individuos salen beneficiados (mutualismo). De esta manera deberíamos excluir el parasitismo y el comensalismo, ya que no todos obtienen beneficios, en el peor de los casos uno de ellos sale perjudicado.
Esto hace que exista un conflicto sobre la "verdadera" naturaleza de la simbiosis. Comúnmente se entiende por simbiosis una relación mutualista excluyendo las dos mencionadas anteriormente, esto se debe a que la definición que se da no es la expuesta anteriormente sino la definición de mutualismo. Este hecho nos lleva a errores de comprensión, y a usar solo la palabra simbiosis para referirnos a relaciones beneficiosas.
Ectosimbiosis y Endosimbiosis
La ectosimbiosis es un tipo de simbiosis en la cual el simbionte vive en el exterior del cuerpo que invade, esto incluye el interior de la superficie del recorrido digestivo o el conducto de las glándulas exocrinas. En cambio en la endosimbiosis el simbionte vive en el espacio intracelular del anfitrión.Ejemplos de ambos tipos serán mostrados a lo largo del blog.
Además de esto en el parasitismo podemos distinguir estos dos casos perfectamente dando lugar a ectoparásitos (en el exterior del hospedador) o endoparásitos vivendo en el interior del hospedador.
Un ejemplo de endosimbiosis es la teoría endosimbiótica descrita por Lynn Margulis apoyándose en trabajos realizados con anterioridad de otros científicos. En esta teoría se describe el paso de una urcariota a una célula eucarionte.
Esto se da siguiendo una serie de procesos, los que nos interesan son los orígenes endosimbióticos de los peroxisomas, las mitocondrias y los plastos.
Los peroxisomas proceden de bacterias primitivas que desarrollaron sistemas de detoxificación, por ello fueron engullidos por fagocitos primitivos, de este modo podían protegerse de la presencia del oxígeno de la atmósfera.
Las mitocondrias provienen de las eubacterias que desarrollaron un metabolismo oxidativo, por último fagocitaron los plastos siendo estos cianobacterias anteriormente, estas cianobacterias fueron las responsables de la crisis del oxígeno.
Además de esto en el parasitismo podemos distinguir estos dos casos perfectamente dando lugar a ectoparásitos (en el exterior del hospedador) o endoparásitos vivendo en el interior del hospedador.
Un ejemplo de endosimbiosis es la teoría endosimbiótica descrita por Lynn Margulis apoyándose en trabajos realizados con anterioridad de otros científicos. En esta teoría se describe el paso de una urcariota a una célula eucarionte.
Esto se da siguiendo una serie de procesos, los que nos interesan son los orígenes endosimbióticos de los peroxisomas, las mitocondrias y los plastos.
Los peroxisomas proceden de bacterias primitivas que desarrollaron sistemas de detoxificación, por ello fueron engullidos por fagocitos primitivos, de este modo podían protegerse de la presencia del oxígeno de la atmósfera.
Las mitocondrias provienen de las eubacterias que desarrollaron un metabolismo oxidativo, por último fagocitaron los plastos siendo estos cianobacterias anteriormente, estas cianobacterias fueron las responsables de la crisis del oxígeno.
Mutualismo: introducción.
El mutualismo es un tipo de relación biológica que se da entre especies diferentes, en la cual ambas especies salen beneficiadas de dicha relación, mejorando su adaptación biológica al medio. Esta relación establecida entre las especies no es obligatoria para la supervivencia de ninguna de ellas, pudiendo deshacer la unión en cualquier momento, aunque se mantiene por interés de ambas.
En ocasiones, se toman las simbiosis estrictas (como el caso de los líquenes) como un tipo de mutualismo, aunque en este caso la diferencia está en que en el caso de la simbiosis la unión es mucho más estrecha ya que al menos una de las especies implicada depende de esta unión para poder vivir.
A pesar de que estas relaciones muchas veces no se tienen tan en cuenta como otras como las simbiosis, la depredación o el parasitismo (mucho más estudiadas en biología), las relaciones de mutualismo tienen una gran importancia para la vida y para el desarrollo de la evolución ya que, por ejemplo, asociaciones como las micorrizas han permitido en gran medida la adaptación de las plantas al medio terrestre; o asociaciones de las plantas y los polinizadores también han jugado un papel muy importante en la evolución.
Dentro del mutualismo se pueden establecer diferentes clases según sea el tipo de intercambio que hacen las especies implicadas. Estas clases son recurso-recurso, servicio-recurso, servicio-servicio.
-Relaciones recurso-recurso. Son las más comunes dentro del mutualismo. En ellas, uno de los implicados aporta un recurso que recibe el otro, el cual no puede obtenerlo por sí mismo, y viceversa. Por ejemplo, es lo que sucede en el caso de las micorrizas, o en los rizobios.
-Relaciones servicio-recurso. En estas relaciones uno de los implicados beneficia al otro dándole algún beneficio material y, a su vez, es beneficiado porque al darle dicho recurso recibe un servicio necesario por parte del otro implicado. El ejemplo más típico de estas relaciones es el de la polinización de las plantas por animales como las abejas que reciben de ellos el polen o néctar pero a cambio realizan la dispersión de sus gametos.
-Relaciones servicio-servicio. En este caso las dos especies implicadas realizan un servicio mutuo. Las relaciones de este tipo no se dan de manera muy frecuente en la naturaleza, aunque también hay algunos ejemplos bastante conocidos como el de la anémona de mar y el pez payaso, relación en la cual ambos son defendidos contra sus respectivos depredadores.
Los animales limpiadores (ciertos crustáceos y peces) especializados en librar a otros animales (generalmente peces) de sus parásitos, de sus tejidos muertos o de restos de comida, obtienen alimento por ello y el animal al que le han hecho la limpieza también sale beneficiado.
La anémona Calliactis parasitica y el cangrejo ermitaño Dardanus calidus, que la lleva a cuestas, también se benefician mutuamente. Así, el cangrejo obtiene la protección que le proporcionan los tentáculos de la anémona con su batería de células urticantes y la anémona obtiene alimento más fácilmente, ya sea por el constante desplazamiento o por los restos de comida que se le escapan o desecha el cangrejo.
La anémona Anemonia sulcata y el pez Gobius bucchichi también entablan una relación de mutualismo. El pez encuentra protección ante sus depredadores al esconderse entre los tentáculos de la anémona, mientras que esta obtiene restos de la comida del pez, a la vez que los movimientos de éste entre sus tentáculos crean corrientes que la limpian de sedimentos y renuevan el agua que la envuelve.
En ocasiones, se toman las simbiosis estrictas (como el caso de los líquenes) como un tipo de mutualismo, aunque en este caso la diferencia está en que en el caso de la simbiosis la unión es mucho más estrecha ya que al menos una de las especies implicada depende de esta unión para poder vivir.
A pesar de que estas relaciones muchas veces no se tienen tan en cuenta como otras como las simbiosis, la depredación o el parasitismo (mucho más estudiadas en biología), las relaciones de mutualismo tienen una gran importancia para la vida y para el desarrollo de la evolución ya que, por ejemplo, asociaciones como las micorrizas han permitido en gran medida la adaptación de las plantas al medio terrestre; o asociaciones de las plantas y los polinizadores también han jugado un papel muy importante en la evolución.
Dentro del mutualismo se pueden establecer diferentes clases según sea el tipo de intercambio que hacen las especies implicadas. Estas clases son recurso-recurso, servicio-recurso, servicio-servicio.
-Relaciones recurso-recurso. Son las más comunes dentro del mutualismo. En ellas, uno de los implicados aporta un recurso que recibe el otro, el cual no puede obtenerlo por sí mismo, y viceversa. Por ejemplo, es lo que sucede en el caso de las micorrizas, o en los rizobios.
-Relaciones servicio-recurso. En estas relaciones uno de los implicados beneficia al otro dándole algún beneficio material y, a su vez, es beneficiado porque al darle dicho recurso recibe un servicio necesario por parte del otro implicado. El ejemplo más típico de estas relaciones es el de la polinización de las plantas por animales como las abejas que reciben de ellos el polen o néctar pero a cambio realizan la dispersión de sus gametos.
-Relaciones servicio-servicio. En este caso las dos especies implicadas realizan un servicio mutuo. Las relaciones de este tipo no se dan de manera muy frecuente en la naturaleza, aunque también hay algunos ejemplos bastante conocidos como el de la anémona de mar y el pez payaso, relación en la cual ambos son defendidos contra sus respectivos depredadores.
Los animales limpiadores (ciertos crustáceos y peces) especializados en librar a otros animales (generalmente peces) de sus parásitos, de sus tejidos muertos o de restos de comida, obtienen alimento por ello y el animal al que le han hecho la limpieza también sale beneficiado.
La anémona Calliactis parasitica y el cangrejo ermitaño Dardanus calidus, que la lleva a cuestas, también se benefician mutuamente. Así, el cangrejo obtiene la protección que le proporcionan los tentáculos de la anémona con su batería de células urticantes y la anémona obtiene alimento más fácilmente, ya sea por el constante desplazamiento o por los restos de comida que se le escapan o desecha el cangrejo.
La anémona Anemonia sulcata y el pez Gobius bucchichi también entablan una relación de mutualismo. El pez encuentra protección ante sus depredadores al esconderse entre los tentáculos de la anémona, mientras que esta obtiene restos de la comida del pez, a la vez que los movimientos de éste entre sus tentáculos crean corrientes que la limpian de sedimentos y renuevan el agua que la envuelve.
Parasitismo: introducción.
El parasitismo es un tipo de relación simbiótica interespecífica. Se produce entre dos organismos, obteniendo beneficios únicamene uno de ellos (el parásito) en detrimento de los recursos del otro (hospedador o huésped), el cual resulta perjudicado. Estos perjuicios pueden consistir en meras molestias o incluso desembocar en la muerte del huésped.
Los parásitos se clasifican, según su forma de parasitar, en tres grupos:
·Endoparásitos: aquéllos que viven en las cavidades interiores del huésped.
·Mesoparásitos: aquéllos que orientan una parte de su cuerpo hacia el exterior y el resto lo
anclan profundamente en los tejidos del huésped.
·Ectoparásitos: aquéllos que viven adheridos a la parte externa del huésped.
También se pueden clasificar, según su tamaño, en:
·Microparásitos: pequeños y muy numerosos. Se multiplican en el interior del huésped.
·Macroparásitos: grandes y poco numerosos. Crecen, pero no se multiplican dentro del
huésped sino que expulsan a los descendientes para que infecten a otros.
Una fase puede ser parásita a lo largo de todas las fases de su ciclo vital o sólo durante fases concretas del mismo.
El parasitismo, una vez que se convierte en carácter adaptativo, se establece por selección natural y provoca sucesivos cambios fisiológicos y morfológicos en el organismo. Normalmente, estos cambios implican una simplificación de ciertos aparatos o sistemas y el desarrollo exacerbado de otros tantos.
En ocasiones, un parásito es hospedado a su vez por otro parásito, denominado hiperparásito. El límite de niveles de parasitismo posibles se reduce a unos pocos, debido a razones de productividad ecológica.
Los parásitos se clasifican, según su forma de parasitar, en tres grupos:
·Endoparásitos: aquéllos que viven en las cavidades interiores del huésped.
·Mesoparásitos: aquéllos que orientan una parte de su cuerpo hacia el exterior y el resto lo
anclan profundamente en los tejidos del huésped.
·Ectoparásitos: aquéllos que viven adheridos a la parte externa del huésped.
También se pueden clasificar, según su tamaño, en:
·Microparásitos: pequeños y muy numerosos. Se multiplican en el interior del huésped.
·Macroparásitos: grandes y poco numerosos. Crecen, pero no se multiplican dentro del
huésped sino que expulsan a los descendientes para que infecten a otros.
Una fase puede ser parásita a lo largo de todas las fases de su ciclo vital o sólo durante fases concretas del mismo.
El parasitismo, una vez que se convierte en carácter adaptativo, se establece por selección natural y provoca sucesivos cambios fisiológicos y morfológicos en el organismo. Normalmente, estos cambios implican una simplificación de ciertos aparatos o sistemas y el desarrollo exacerbado de otros tantos.
En ocasiones, un parásito es hospedado a su vez por otro parásito, denominado hiperparásito. El límite de niveles de parasitismo posibles se reduce a unos pocos, debido a razones de productividad ecológica.
Comensalismo: introducción
Este tipo de interacción entre poblaciones describe una situación en la cual, en una relación entre dos especies, una obtiene un claro beneficio y la otra no resulta perjudicada ni beneficiada.
El término se acuñó originalmente para describir cómo los animales carroñeros se aprovechan de las sobras que dejan los animales cazadores después de alimentarse de sus presas. Sin embargo, el término se ha extendido a otro tipo de relaciones:
- Inquilinismo: un organismo se aloja dentro o en la superficie de otro, sin que suponga un perjuicio para la segunda. Así, estos animales encuentran cobijo, refugio o soporte. Por ejemplo, las bellotas de mar que viven sobre la concha del mejillón.
- Foresis: un organismo emplea a otro animal para transportarse. Por ejemplo, las rémoras con los tiburones.
- Metabiosis: un organismo emplea una parte del cuerpo de otro animal, una vez éste ha muerto. También denominado tanatocresis.
Una relación comensal puede evolucionar hacia el parasitismo en ciertas ocasiones: por ejemplo, cuando una cantidad de inquilinos excesiva compite por el alimento con el animal posadero y reduce ostensiblemente la cantidad que puede ingerir.
Sin embargo, también puede darse el caso contrario: una relación de parasitismo puede derivar en comensalismo, si el parásito deja de causar daño al hospedador. Así, un protozoo que vive en el interior de un tritón norteamericano está presente en tan altas concentraciones que resulta ilógico pensar que no causa un debilitamiento severo del hospedador; sin embargo, estos tritones llevan una vida perfectamente normal y realizan sus funciones vitales sin alteraciones. La explicación radica en que el vector intermediario del protozoo es una sanguijuela que habita en los estanques, donde se aparean los tritones; si la vida del animal fuera acortada por el hospedador, impidiendo su reproducción, el protozoo moriría con él. El parásito, por tanto, ha evolucionado hacia la benignidad, convirtiéndose en un comensal.
El término se acuñó originalmente para describir cómo los animales carroñeros se aprovechan de las sobras que dejan los animales cazadores después de alimentarse de sus presas. Sin embargo, el término se ha extendido a otro tipo de relaciones:
- Inquilinismo: un organismo se aloja dentro o en la superficie de otro, sin que suponga un perjuicio para la segunda. Así, estos animales encuentran cobijo, refugio o soporte. Por ejemplo, las bellotas de mar que viven sobre la concha del mejillón.
- Foresis: un organismo emplea a otro animal para transportarse. Por ejemplo, las rémoras con los tiburones.
- Metabiosis: un organismo emplea una parte del cuerpo de otro animal, una vez éste ha muerto. También denominado tanatocresis.
Una relación comensal puede evolucionar hacia el parasitismo en ciertas ocasiones: por ejemplo, cuando una cantidad de inquilinos excesiva compite por el alimento con el animal posadero y reduce ostensiblemente la cantidad que puede ingerir.
Sin embargo, también puede darse el caso contrario: una relación de parasitismo puede derivar en comensalismo, si el parásito deja de causar daño al hospedador. Así, un protozoo que vive en el interior de un tritón norteamericano está presente en tan altas concentraciones que resulta ilógico pensar que no causa un debilitamiento severo del hospedador; sin embargo, estos tritones llevan una vida perfectamente normal y realizan sus funciones vitales sin alteraciones. La explicación radica en que el vector intermediario del protozoo es una sanguijuela que habita en los estanques, donde se aparean los tritones; si la vida del animal fuera acortada por el hospedador, impidiendo su reproducción, el protozoo moriría con él. El parásito, por tanto, ha evolucionado hacia la benignidad, convirtiéndose en un comensal.
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